Las Pastillas del Abuelo en el Luna Park - Viernes 11 de abril

Locura y realidad
Por Lucas.

Indudablemente, Las Pastillas del Abuelo están gestando algo en las nuevas generaciones. Las entradas agotadas en 20 días, para el show en el Luna Park, dan muestras que esta banda, que apenas cuenta con 2 discos editados, ha pegado un crecimiento increíble, de una magnitud comparable a los primeros años de los Redonditos de Ricota.
Pero quedarse con el simple hecho de haber colmado el estadio de Bouchard y Corrientes no es suficiente para el grupo liderado por "Piti" Fernández. El debut en el palacio de los deportes tuvo todos los ingredientes para ser lo que se esperaba: una verdadera fiesta.
Con globos, silbatos, gorros y banderas, el público joven (en su mayoría entre 15 y 20 años) no dejó libre un solo espacio en el campo y la platea. En un costado del escenario la prensa y los invitados aguardaban la salida de los protagonistas de la noche, hasta que todos los ojos de desviaron ante la llegada de Manu Quieto de La Mancha de Rolando que sin generar tanto revuelo se quedó esperando el comienzo del recital.
Pasadas las 21 se apagaron las luces y desde una pantalla que cubría el escenario se proyectó un video (desde el sector de prensa no se pudo apreciar) que puso a saltar a la audiencia. "Si esto no es la fiesta, la fiesta dónde está", cantaban los miles de fanáticos.
Las primeras en sonar fueron Almafuerte, Cubano, Candombe e Historias. Después del cuarto tema, los encargados de seguridad le señalaron amablemente a los periodistas que ya podían retirarse de esa zona y, así como se suelta al ganado para que corra por el pastizal, cada uno de nosotros fue liberado hacia el campo. A transpirar la fiesta como todos los seguidores que mientras tanto deliraban con Oportunistas, Cerveza, Me han dicho, Postura y Candombe de resaca. Antes de encarar Viejo, el líder de la banda le dedicó algunas palabras de afecto a su familia.
Durante las casi 3 horas y media de show pasaron 36 temas, un set acústico, 2 veces que Piti se tiró de palomita contra la audiencia y varios invitados que participaron en la fiesta, entre los que se destacaron el cantante de la Mancha de Rolando, Maiquel de Kapanga, Ale Kurz de El Bordo y Mickie de Los Piojos.
A lo largo de la noche fresca, pero cálida dentro del Luna, pasaron temas como La rosarina, Duda, José, Osiris, Peldaño y Lo más fino.
En las letras (tan directas y sin vueltas) de Las Pastillas del Abuelo puede notarse una similitud hacia artistas como Ricardo Iorio y el Indio Solari. En su música se caracteriza la fusión del rock, reggae, candombe, chacarera y jazz. Quizás sea esta amplitud de estilos mas la simplicidad lírica sean lo que atraiga tanto a un público joven que busca un grupo con que identificarse.
El cierre, a todo volumen, con papelitos por el aire y aun con el aguante físico de los aficionados fue con Otra vuelta de tuerca, Por colectora, Cowboy y Skalipso –Piti prometió que era la única vez que iban a terminar un show con ese tema-.
Con total humildad, el cantante bajó del escenario y a un costado repartió abrazos y saludos a cada uno que se le acercaba.
Hasta el viernes a la noche, los puntos más altos de la banda habían sido el lleno absoluto en Obras en 2006 y las tres fechas agotadas ese mismo año en El Teatro de Colegiales. Sin lugar a dudas, ahora hay un nuevo ganador: la fiesta y debut en el Luna Park.